Homilía
Homilía del 31 de mayo de 2009
Charla ID:
2009.05.31.H
Título:
La inefable realidad del Espíritu Santo
Duración:
0:28:23
Temas:

Palabras Clave:
Fecha Litúrgica:
Texto Bíblico:
Jn 14: 23-31
Comentario:
Resumen:
El Padre explica la celebración de Pentecostés y la naturaleza del Espíritu Santo, a quien los santos padres llamaban "el gran desconocido". Detalla la teología trinitaria, explicando cómo el Padre, al conocerse a sí mismo, engendra al Hijo por generación intelectual, y cómo del amor mutuo entre Padre e Hijo procede el Espíritu Santo por espiración. El Espíritu Santo es presentado como el Consolador, el Don por excelencia, que nunca habla de sí mismo sino que siempre conduce hacia Cristo. Es quien otorga todos los dones y gracias, quien nos ayuda a comprender y vivir las enseñanzas de Jesús, y quien nos da la valentía para dar testimonio en el mundo. Es también quien nos conduce a la verdad completa y nos da la verdadera libertad. Se destaca que la acción del Espíritu Santo es misteriosa y silenciosa, manifestándose a través de virtudes como la humildad, la sencillez y la obediencia. Produce frutos como el amor, el gozo, la paz, la generosidad, la bondad, la fe, la mansedumbre y la continencia. El Padre enfatiza que el Espíritu Santo actúa especialmente en los humildes y pequeños, no en el ruido ni en la ostentación. La homilía concluye invitando a pedir al Espíritu Santo que llene los corazones de los fieles con su gracia y les ayude a seguir a Cristo, recordando que su acción se manifiesta en el silencio y la humildad, no en el estrépito ni en las manifestaciones exteriores.
Comentario Técnico:
Buena calidad de sonido