Para uso interno por el estilo de hablar del Padre. Comenta cuando el Arzobispo de Guayaquil fue a comer con él y con D. Paulino, D. Manuel y trajo a un jesuita de la Gregoriana para que nos conocieran. Paulino al final de la comida estaba gratamente entusiasmado. En la comida se mostró el profesor con total ortodoxia. Cuando se marchó el Arzobispo y el profesor, el Padre le dijo que "yo no me fio ni un pelo." Luego fueron a visitar a un cura del Opus, confesor de Paulino, quien les dijo que este profesor esta destruyendo al clero guayaquileño con sus herejías. Paulino le miró al Padre con admiración. Luego comenta un Credo que se inventó un sacerdote en Bogotá con quien el Padre y D. Manuel concelebraron. Menciona a Juan Antonio y Paco Oterino que iban a comprar una botellita de coca cola todas las noches antes de cenar. Menciona a D. Manuel. Y sigue comentando cosas que no le gustaron en Guayaquil. Menciona a Antonio Parra. Menciona que su primera misa de domingo, el sermón duro 25 o 35. Al domingo siguiente un super llenazo a la misma hora. Menciona Juan Marín y Daniel.