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Homily

Homily del 15 de febrero de 2009

Charla ID:

2009.02.15.H

Título:

¡La fuerza y la profundidad de la Palabra de Dios no adulterada!

Duración:

0:40:35

Temas:

Palabras Clave:

Fecha Litúrgica:

Texto Bíblico:

Lc 8: 4-15

Comentario:

Muy apta para el público. El Padre contrapone la palabra de Dios de hoy día, adulterada, con la verdadera Palabra de Dios. El Padre narra la parábola del sembrador y se fija en el aspecto de la semilla. Hoy vivimos en una gravísima crisis en la Iglesia. La palabra de Dios que hoy se predica es adulterada. Se predica hoy que el Cristo de la fe no es el Cristo de la Historia. Se niega la historicidad de los evangelios. Se dice que la Iglesia es democrática. No es monárquica. Se exalta el papel de los seglares sobre el clero. El infierno no existe. Todos los hombres se salvan. La semilla que se siembra es de mala calidad. Por eso, las multitudes son engañadas. La verdad absoluta no existe. Hay que respetar el error. Y también podemos hablar del sembrador. El sembrador tiene que estar identificado con la palabra de Dios. De no hacerlo es pura hipocresía. No se escucha la palabra de Dios porque no es predicada. Como no es la buena semilla, no puede producir buen fruto. Tenemos que buscar la verdadera palabra de Dios. Narración del pasaje de Emaús. "No te dabas cuenta como ardía nuestro corazón..." "La Palabra de Dios es viva y eficaz..." Hijos, os vais a enfrentar con multitud de enseñanzas que no son el evangelio. Nadie es engañado sin culpa de su parte. ¡Buscad la verdadera enseñanza de Jesús! La predicación es difícil e insoportable. "¡Ay de mí si no predicara..." Bernanos, "A quien hiere primero la palabra de Dios es al predicador". "Mis palabras son espíritu y vida". Recuerdos de una persona que se confesó con el Padre y dijo que no se sentía capaz de perdonar. El Padre le dijo: "Pero yo os digo amad a vuestros enemigos..." y la persona le dijo que estaba dispuesta a personar. El amor como proyección del que tenemos a Dios pero hacia nuestros hermanos es la fuerza que mueve al Sol y a las estrellas. "Como el Padre me amó, así os he amado..." "Os he dicho esto para que mi alegría sea completa." "Nadie tiene amor más grande..." "Ya no os llamaré siervos..." La palabra del Señor enciende nuestro corazón. El Ciego de Jericó, al oír a Jesús, se encaminó hacia Él. "¿Qué quieres que te haga?" Pasaje de Lazaro muerto. "Yo soy la Resurrección y la Vida..." Al ciego, "¿Crees tu esto...?" Aquéllas palabras: "Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen". El discurso de Jesús de las Bienaventuranzas, lo más contrario a lo que el mundo ha sostenido. Los que lloran, los que sufren, los que son perseguidos por causa de su nombre. "El amigo del esposo se alegra..." Hay que oír la voz del Esposo. El mundo de hoy busca la alegría donde no está. "Las ovejas siguen al Pastor porque conocen su voz". Hoy muchas ovejas no oyen la voz del pastor. La voz de Jesucristo, hablándole a la naturaleza: "Calmaos", al viento y a las olas. Cristo es capaz de hablar a la muerte: "Lázaro, sal fuera". El Hijo de Naím. "Joven, contigo hablo..." "Yo tengo poder para dar mi vida..." Nosotros no tenemos ese poder. El demonio se ha hecho cargo de la Iglesia. La misa ha dejado la muerte de Cristo, sino una comida de hermandad. Pero la misa es participar de la muerte de Cristo. El final del discurso de la Ecuaristía en Cafarnaúm. "Esto no hay quien lo aguante." "¿A dónde iríamos? Tú tienes palabras de Vida Eterna". "El que busca su propia vida, la perderá". "Si el mundo os odia, sabed..." "Os he puesto para que vayáis y deis fruto..." "No tengáis miedo..." "Te doy gracias, oh, Padre..." Pero lo más sublime de Él es cuando nos dice "Te amo". La esposa del Cantar: "Vedle que llega..." Esto no es metáfora ni poesía. Cristo está enamorado de nosotros. "Ven hermana mía..." "Es la voz del esposo cuando me llama..." "Nadie demuestra más amor..." ¡Si oyéramos la Palabra de Dios..." "Si de nuevo me vieres, allá en el valle donde canta el mirlo..."

Resumen:

El Padre analiza la parábola del sembrador, explicando cómo en la actualidad existe una grave crisis en la Iglesia donde frecuentemente la palabra de Dios es adulterada o malinterpretada. Señala que hoy se difunden falsas doctrinas que niegan verdades fundamentales de la fe católica, como la divinidad de Cristo, los milagros, la autoridad papal y la existencia del infierno. Enfatiza la importancia de buscar y escuchar la auténtica palabra de Jesús, que es "espíritu y vida", capaz de transformar corazones. Contrasta las verdaderas enseñanzas de Cristo con los tópicos vacíos y discursos complacientes que abundan en la actualidad. Ilustra esto a través de diversos pasajes evangélicos que muestran el poder transformador de las palabras de Jesús, como las bienaventuranzas, los milagros y sus enseñanzas sobre el amor. El Padre destaca especialmente el mensaje del amor divino, explicando cómo Cristo no solo nos ama sino que está "enamorado" de cada uno de nosotros, utilizando el simbolismo del Cantar de los Cantares. Concluye enfatizando que escuchar y aceptar este amor de Cristo puede transformar radicalmente nuestra existencia, dándole un sentido profundo y verdadero. Advierte sobre la necesidad de mantenerse fieles a la auténtica doctrina en tiempos de confusión, recordando que solo serán engañados aquellos que voluntariamente elijan la mentira sobre la verdad.

Comentario Técnico:

Buena calidad de sonido

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