Para uso interno por el estilo de hablar del Padre. El Padre habla de que todos nosotros hemos recibido el don de la sensibilidad para la percepción de la verdad y de la belleza. A algunos les ha dotado este don de grado extraordinario. Todos los dones tienen que ser cultivados. Hay que apreciar la belleza en la música, pintura, literatura, para poder llegar a un conocimiento de Dios. El Padre habla de la belleza en el ser humano y en especial la belleza de la mujer. Pero la belleza de la mujer está relacionada con el tema de la concupiscencia por el pecado original. Uno se enamora de la belleza y del resplandor del ser infinito. Necesitamos ver la belleza con nuestros ojos. La belleza de Cristo. Es necesario la reciprocidad en el amor. Si no estamos enamorados, estamos en la tristeza. Pero para tratar con Dios tengo que percibir su belleza. La importancia de la oración. Es vital. Hay que darle la paliza al Señor. Dios quiere ser nuestro amigo. Necesitamos amar y sentirnos amados. Menciona una carta de Alfonso. Luego habla de la espera ansiosa porque Dios tiene el factor sorpresa.