Para uso interno por el estilo de hablar del Padre. El Padre empieza diciendo que no pensaba dar la meditación porque no se sentía muy bien. El Padre compara las bienaventuranzas consigo mismo y que no podría hablar de ellas. La bienaventuranza de la pobreza, la pureza, etc. El Padre se acuerda de la frase de "El Ladrón de Bagdad", "pobre entre los pobres". Hace alusión a sus folias pidiendo que se pueden tomar para hacer la oración. El Señor es el único revolucionario. La Bienaventuranza de la mansedumbre. La Bienaventuranza de la paz. Y la paz es Cristo. La limpieza de corazón es el primer mandamiento. El Señor se define como estando en contra del sistema de este mundo. El está con los pobres y los arrinconados, como la mujer adúltera. Jesús y el ciego de Nacimiento. Jesús y Zaqueo, Jesús y Lazaro. La Iglesia de nuestro tiempo no está con los pobres. Hay que buscar a los auténticos miserables. Las bienaventuranzas son el meollo del evangelio. Siempre me hicieron pensar mucho las bienaventuranzas desde pequeño. Las Bienaventuranzas son también la doctrina de la esperanza. Las Bienaventuranzas y la poesía. Recuerdos del Padre cuando leyó el Cura Rural de Bernanos, y decía que el sacerdote podría dar su propia alegría. Ayer leía una carta emocionante de Alberto, de Guayaquil. El Padre se quedó impresionado con esa carta de Alberto.