Para uso interno por el estilo de hablar del Padre. Muchas referencias de acontecimientos de la época. El Señor instituyó el sacerdocio por pasos. Primero el sacramento de la comunión, después el de la confesión. El núcleo del sacramento del orden fue instituido, sin embargo, hoy. La primera misa que se hizo en el mundo. Se abre el Nuevo Testamento y se cierra la antigua alianza. "Como el Padre me envió, así..." El sacerdote es otro Cristo y debe reproducir la vida de Cristo. Es la continuación de Jesús entre los hombres. Hoy se hace más necesario que nunca. Hay que dar testimonio auténtico. Sin embargo, parece que cuando mayor es la necesidad, mayor es la crisis sacerdotal. Cuando más falta hacen los médicos, menos hay. Esta mañana, antes de las noticias, escuché algo del apostolado social en la conferencia episcopal. Hoy se celebra el día de Caritas. Y decía el hombre que los obispos españoles están preocupados por el problema del paro laboral. Y que había que denunciar la injusticia. Y el Padre se ha puesto a pensar. ¿A qué se debe el paro? Al desmadre social y político. Pero ¿quién va a pensar en esto? Las comisiones episcopales no sirven de nada. El complejo de inferioridad y la tontuna. Hoy más que nunca hace un sacerdocio auténtico y enraizado en Cristo. Hoy hay una teología desvinculada con la realidad. Son puros tópicos. El Padre vuelve a hablar del paro. Pero el verdadero problema no es denunciado. La gente se divide en dos grupos: la gran masa que no piensa, y la gente inteligente que piensa. Pero la gran masa, cuando oye un tópico, le cae gordo también. Hace falta hacer oración para no vivir en las batuecas. Un lenguaje artificial. Todos tienen un mismo tono de voz en el clero. Es una voz estandarizada. Octavio sabe imitarla muy bien también. Nosotros tenemos defectos, pero tenemos que enraizarnos en Cristo. Vivir la obediencia, barrer nuestro corazón. Haciendo esto es como haremos bien a la gente que nos va a comendar. Diremos tonterías si no lo hacemos así. La obediencia abarca multitud de aspectos. Yo no me considero un hombre perfecto, pero tengo ganas sinceras de ser un buen sacerdote. Este mundo se nos escapa de las manos. Referencia al golpe y la actitud de los obispos con respecto al golpe y a la constitución. Menciona a Antonio Parra que está en el ejército. Para ser cristianos tenemos que ser hombres. Y la hombría supone valentía y fidelidad. Lo peor es que nos desprecien, no que nos odien. Id a la capilla hoy un rato, especialmente los que vais a ser sacerdotes pronto. El sacerdote está puesto para confirmar a sus hermanos en la fe. No tenemos derecho a volver la vista atrás. Tenemos que dar la cara. Yo este año celebro mis bodas de plata sacerdotales. El Padre se acordaba de cuando el Señor le llamó, algo tan singular, que no la puedo terminar de contar ni la contaré nunca. El Padre rememoraba si el Señor había cumplido su palabra que me dio al llamarme al sacerdocio. Yo no se he sido fiel, pero el Señor sí ha sido fiel. Algunos de los mayores ya estáis viendo los frutos. Vais a sufrir mucho, pero vais a gozar mucho también. Una entrega incondicional al Señor. Juan Andrés le envió una carta donde le decía que le había impresionado mucho una carta que el Padre le había escrito a Juan Antonio y a Paco Oterino antes de irse, sobre ser ellos la prueba de que su sacerdocio no ha sido un fracaso. Menciona de nuevo la carta de Jose Antonio diciendo que hagamos oración. Nosotros veremos cosas más bonitas que las que el Padre está viendo si somos fieles. Y aquí lo dejamos pero no os quiero cansar. Hoy es el día del mandamiento nuevo, y hacemos un clima muy bonito de amor entre nuestros hermanos. Yo os riño porque os quiero mucho.