Para uso privado por el estilo de hablar del Padre. El mandamiento primero y principal es un mandamiento por el cual se le impone a los hombres amar. Amar es la vocación del cristiano. Amar y ser amado. Todo debe estar animado por el amor. La entrega supone totalidad. Dios requiere la totalidad. Es el único Señor. El peligro de los ídolos. Teoría del "barrido". Nuestra tendencia tira hacia abajo. Nos apegamos a tantas cosas. Hay que coger la escoba todos los días. Es lo más normal. Las mil nimiedades que ocupan nuestro corazón. Pero a veces no son nimiedades. Puede ser el apego en el apostolado. La necesidad de tener la presencia de Dios durante el día. En el estudio, nos puede suceder lo mismo. La mortificación de la imaginación. La mortificación del corazón. Para llevar la presencia de Dios durante el día hay que tener corazón. El posible malentendido del segundo mandamiento. La explicación del Padre del mandamiento de amar al prójimo. Menciona una llamada de teléfono desde Burgos por Lope y Juan Andrés que le comentan el plan de estudios de teología en Burgos. A este mundo difícil y que se muere solo se puede ir con el Amor y si estamos enamorados de Dios. Menciona a Juanjo al que le dijo que ayer un día maravilloso para empezar de nuevo. Referencia a las Folias de la Oración. Referencia a una lectura que hizo del Camino de Perfección de Santa Teresa de Jesús. El amor y la perseverancia más importante que los éxtasis. La humildad es mejor que la mejor oración contemplativa. La prueba de toque del amor es la fidelidad. "El que pone la mano en el arado y (no) vuelve la vista atrás..." No seamos cumplidores solamente.