El Padre explica al principio que la homilía será dedicada al evangelio del Domingo 18 después de Pentecostés, pero que la siguiente homilía irá dedicada a la Virgen del Pilar. Además el Padre usa para su comentario la misma versión del evangelio de San Mateo pero narrado por San Marcos. Comenta el Padre el Sínodo de la Familia. Habla de dos grupos de personas en este sínodo: Progresistas y los que intentan mantener la doctrina tradicional de siempre. Estos últimos tienen el apoyo de la Tradición y de la Escritura. El Padre duda de que los tradicionalistas estén tan bien preparados como lo están los progresistas. El Padre habla de la distinción entre la filosofía del ser y la filosofía idealista. Menciona al jefe de los progresistas, Kasper. Es un historicista y un modernista. Menciona al filósofo Schelling como el que influye en Kasper. La razón de todo es el abandono de la filosofía del Ser a través de Kant y Hegel. Menciona que el Papa dijo que en Dios no existe la naturaleza sino tres personas. Los tradicionalistas no tienen nada que hacer en el Sínodo. Se trata de eliminar el concepto de naturaleza humana. Solución ante esta situación: la Fe y la obediencia. Las señales de los últimos tiempos.