La Alegría, fruto del Espíritu Santo. No es la alegría mundana. Necesitamos la alegría cristiana. Es triste como para llorar como el mundo y los cristianos desconocen la alegría. Nosotros mismos podemos entrar en la vulgaridad. "Os anuncio una gran alegria..." La alegría es el patrimonio de los cristianos. Las palabras de Nietzsche cuando miraba a los cristianos saliendo de misa. Chesterton hablando de la alegría. No hay más alegría que la de ser santos. "Nos hiciste Señor para tí..." de San Agustín. "Venid a mí los que estáis cansados..." Bernanos decía que la Iglesia es la detentadora de la alegría, pero cómo podía enseñarla en una homilía semanal. Hoy la gente vive manipulada y esto produce un vacío interior. Recuerdos del Padre cuando era niño y se preguntaba sobre el objeto de su vida. "Yo os voy a enseñar un carisma mejor". El pasaje de los discípulos de Emaus y cómo sentían que su corazón ardía... Hemos dejado de creer en las Palabras del Señor. San Pablo decía: "Alegraos siempre en el Señor". Si sabemos que para nosotros la vida es Cristo, entonces poseemos la alegría perfecta. "Para mi la vida es Cristo y la muerte ganancia". Los hombres hoy buscan la alegría por caminos opuestos a Dios. Las bienaventuranzas y el mundo actual. San Juan Bautista decía: "El amigo del esposo..." Para mucha gente la cruz de Cristo es escándalo y locura. Pero ahí está la felicidad. "Llevadnos tras de ti..." Seguid a Cristo produce la alegría perfecta. "Gocémonos amado, y vámonos a ver en tu hermosura..." El sufrimiento y la alegría. "Mi amado subiremos al monte del tomillo y de la jara..." Bucar al Señor incluso cuando no lo vemos. "Subí hasta las estrellas..."