Homilía
Homilía del 18 de abril de 2010
Charla ID:
2010.04.18.H
Título:
Las cualidades sobrenaturales para ser buen pastor
Duración:
0:44:46
Temas:
Palabras Clave:
Fecha Litúrgica:
Texto Bíblico:
Jn 10: 11-16
Comentario:
Apta para el público a pesar de una mención pasajera a un acontecimiento en España sobre la ordenación de un obispo. En la misa del rito latino que estamos celebrando la Iglesia nos propone un fragmento del Buen Pastor. En estos tiempos de ofensiva contra los sacerdotes conviene hablar del Buen Pastor. Está bien delineada por Jesucristo, frente a la crisis de identidad. Vivimos en un mundo como se desmorona. La Iglesia está en un periodo de crisis como nunca se había conocido. La crisis de la Iglesia es la crisis del mundo. En este mundo necesitamos la presencia de buenos pastores. ¿Cómo debe ser un buen pastor? ¿Cuál es su misión? Yo soy el Buen Pastor. El que ama a sus ovejas y se preocupa por sus problemas. En la pastoral, hay un método que no falla: el amor a las ovejas. Debe estar dispuesto a dar la vida por sus ovejas. Y conoce a sus ovejas y las llama por su nombre. Y va delante de ellas, dándole ejemplo. Da testimonio de Jesucristo. Su oficio es dirigir a las ovejas y librarla de los peligros. "Centinela, ¿qué hay de la noche?" Librarla de los malos pastores. Les proporciona buenos pastos. La buena doctrina de la Palabra que él mismo ha recibido: "Id por todo el mundo..." Les da la buena doctrina y les enseña a distinguir entre el bien y el mal. El mal pastor habla sin abordar los problemas de las ovejas. Habla de pájaros y flores y de agradar al sistema. Si las palabras son fieles a Dios, el mundo rechazará. El buen pastor será odiado por el mundo. El mercenario trabaja por la paga. No le interesa las ovejas. Depende del sueldo. Lo que pueda sacar de ese oficio: honores, cargos, fama... El Buen Pastor no trabaja por salario. Las ovejas no escuchan la voz del mal pastor porque es un extraño y no siguen la voz de los extraños. No conocen la voz del extraño porque nunca la oyen. Y no la oyen porque no está nunca con ellos. Mención a tantos obispos para la toma de posesión del obispo de Valladolid. ¿Cómo es posible tantos obispos juntos abandonando sus diócesis? Hoy no hay sacerdotes. Falta de pastores. Los jóvenes han perdido la ilusión por la santidad. No hay sacerdotes porque no se ora. "Rogad al dueño de la mies..." Hay que ser otros Cristos. No se utilizan los métodos que nuestro Señor estableció. Para fines sobrenaturales se requieren medios sobrenaturales. La oración y el testimonio de la propia vida. El sacerdote es alter christus. La gente debe ver en los sacerdotes la figura del Señor. Yo me sonrío cuando veo los métodos puramente naturales para fomentar las vocaciones. El camino del sacerdocio es el de la inmolación. A la juventud no le seducen los caminos fáciles, sino los difíciles. "El que pierda su amor por mí..." Los jóvenes no son tontos. Los jóvenes normales son generosos. Hay que proponerles que sean como Jesucristo, no que sean como ellos mismos. La madre de los Zebedeo y su petición. "No sabes lo que pides..." El Señor les propone un camino difícil. Los jóvenes eran valientes. "Habéis sido bautizados para participar en la muerte de Cristo..." La propuesta de los derechos humanos a los jóvenes. No se les propone a los jóvenes los verdaderos caminos. Bastaría que los pastores intentáramos imitar a Jesucristo... Estamos llenando los seminarios de mediocres. Los seminarios en EE.UU. Los demonios y el Cura de Ars: Tres sacerdotes como tu... La verdadera propuesta para los seminarios. Proponer la doctrina de Santo Tomás en los seminarios. Las virtudes propias del buen pastor deben exponerse a los seminaristas. El problema del ecumenismo resuelto en el evangelio de hoy. No está en renunciar a nuestras propias verdades. Nuestras verdades son irrenunciables. "Hay otras ovejas que no son de mi rebaño..." El acercamiento a la Iglesia encaminado en Jesucristo. Hoy se dice que no hay que ser misioneros. Lo que no esté fundado en Jesucristo está condenado al fracaso. A los jóvenes hay que proponerles la figura de Jesucristo y a ser testigo de Jesucristo. Enamorarse de Jesucristo. Este es el secreto. El intento serio de ser otros Cristos. Los obispos que se pasan viajando. Una vida escondida en Cristo Jesús: "Vuestra vida está escondida en Cristo Jesús" decía San Pablo. El Padre recita: "Hablarlo sin vivirlo es triste cosa..." No recuerdo bien la estrofa. La fábula del ciego y la rosa.
Resumen:
En su homilía, el Padre aborda la figura del "buen pastor" basada en el Evangelio de San Juan, poniéndola en contexto con la actual crisis en la Iglesia y el mundo. Señala que esta crisis no es solo moral y social, sino también sobre la esencia y misión de la Iglesia misma. El Padre destaca que el buen pastor, que representa al buen sacerdote, debe estar orientado por el amor y el sacrificio por sus fieles, teniendo unas características delineadas por Jesucristo mismo: amor desinteresado, conocimiento íntimo y personalizado de sus ovejas, y vigilancia constante para protegerlas del mal y guiarlas a pastos seguros, lo que simboliza la buena doctrina. En contraste, el mercenario, es decir, el mal sacerdote, se describe como alguien que actúa por interés personal y es incapaz de ganarse el respeto y la escucha de sus fieles, pues estos perciben la falsedad en sus intenciones. En un mundo que olvida los valores divinos y naturales, el Padre subraya que es crucial que los pastores se preocupen más por imitar a Jesús y menos por complacer al sistema o ganar fama. La crisis de vocaciones sacerdotales se presenta también como un síntoma de la falta de fervor auténtico y vida espiritual, sugiriendo que los métodos humanos y psicológicos actuales son insuficientes y ridículos. Propone que el verdadero medio para fomentar vocaciones es la oración y la vida ejemplar de los pastores, quienes deben reflejar a Jesucristo en su comportamiento diario. Finalmente, el Padre aborda el tema del ecumenismo, criticando la tendencia a diluir las verdades católicas en un esfuerzo por atraer a otras religiones. Insiste en que cualquier acercamiento debe estar centrado en Jesucristo y su verdad, sin concesiones a la falsedad. Concluye que la solución a los problemas de la Iglesia, y por ende del mundo, radica en tener pastores que vivan tan cerca de Cristo que irradien su aroma espiritual, siendo auténticos testigos de su presencia y doctrina.
Comentario Técnico:
Buena calidad de sonido