Agradable homilía de recepción de los niños de Abanilla. El Padre explica lo que son los ángeles, y luego los ángeles custodios. Un ángel nos acompaña siempre. Lo dice el evangelio de hoy. Los adultos necesitamos más ayuda que los niños. Nos debemos volver como niños. Esta fiesta hoy tiene para nosotros un significado especial. Por primera vez, unos niños de Abanilla han venido al Pedregal. Aquí han pasado muchos chicos. Y muchos de ellos se han entusiasmado con querer al Señor. Le pasaba a ellos lo que al Padre le pasaba de pequeño. El Padre empezó a conocer al Señor y a interesarse por el Señor. El Señor ha querido traer a los niños de Abanilla, mandando a D. José allí. El Padre cuenta que hace muchos años estuvo en Abanilla. Y ahora fue cuando envió a D. José le dijo que había muchos chicos en Abanilla. El Pedregal va a ser vuestra casa. Sólo han venido cinco niños de Abanilla. Vamos a querer a estos niños como a nuestros hermanos. Y vais a encontrar a Jesús, como vuestro amigo. Vuestra vida va a cambiar. Menciona a Francisco José, José Carlos y Miguel Angel. El Padre va a ofrecer la misa por los niños de Abanilla.