Lectura
Lectura del 16 de julio de 1981
Charla ID:
1981.07.16.L
Título:
Reflexiones sobre el modo que Dios nos ama
Duración:
0:24:50
Temas:
Palabras Clave:
Fecha Litúrgica:
Texto Bíblico:
Can 1: 2
Comentario:
El Padre dedica esta lectura a hablar sobre la dificultad que tiene al escribir sobre el amor de Dios. El Padre comienza diciendo que se le hace cuesta arriba hablar y escribir sobre estas cosas sobre el Cantar. Le decía a Fernando Crespo que hacer estas lecturas a los nuestros es demasiado fino. Hay que echarle cara dura. Mi dificultad no es en ser un "palizas". Cuando os veo a todos vosotros me pongo muy contento. Estoy muy contento con los chicos de Burgos. Menciona a Lope y a Juan Andrés. Los veo con mucha ilusión. Tenemos que ser mejores los mayores al ver a los niños tan contentos. El Padre se encuentra a la mitad de su vida. El Señor bendice a estos críos. Cuando el Padre falte las cosas serán incluso mejor. Dios nos hace unos regalos estupendos con los hijos. Pero hay todavía regalos muchos más subidos de Dios. Nuestros hermanos son una prueba del amor que Dios nos tiene. Para los que se van a hacer curas pronto, estos niños son unas primicias. El Padre habla que en sus primeros años no consiguió nada. Esta mañana no os he dado sermón ni charlas. Estaba cansado. Y que es difícil deciros algo nuevo. Hemos dicho la misa por Carmencica y en acción de gracias por mi sacerdocio. Decíamos ayer que, como en el amor humano, en el divino existe el hecho de que el esposo de hace preceder con regalos. Dios quiere, puede y debe hacer esos regalos. La exige nuestra propia condición de espera, como la parábola de las diez vírgenes. Vivimos de la fe, de primicias, de nostalgias. Necesitamos los regalos que anuncian al esposo. La alegría de nuestros hermanos pequeñitos es uno de esos regalos. Luego está el hecho de que nosotros vamos a conociendo a Dios poco a poco. La caridad está incoada en este mundo. Nos vamos ejercitando en la caridad aquí. Llegará a su plenitud en el cielo. Los teólogos hablan de dos depósitos para llenar de aguas. Uno es pequeñito y otro infinito, para expresar lo que pasa con el amor. Todo esto es bellísimo. Todo esto lo expreso Dante. Dios nos va educando y preparando nuestro corazón en el arte de amar para el conocimiento de su belleza. Dios es el amor infinito. Y no está dicho todavía en las folias. Dios posee todo en el amor infinito. Una de las condiciones en aquél que ama es la reciprocidad. Dios tampoco nos posee en plenitud y también está en nostalgia con nosotros. Dios es un divino impaciente, como decía Pemán. Y por eso nos hace regalos que son primicias. Esos regalos son voluntarios y son necesarios. No lo puede evitar.
Resumen:
Resumen
Comentario Técnico:
Buena calidad de sonido, aunque por unas milésimas de segundo la grabación empieza cuando el Padre ya está hablando. También hay mucho ruido de viento durante la grabación.