Para uso interno por el estilo de hablar del Padre. El Padre habla de los consejos de San Pablo a su discípulo Timoteo. Las cualidades para aquéllos que deseen ser obispos. Si alguno desea ser obispo, es bueno. El episcopado es la culminación del sacerdocio. Yo no he seguido el consejo de San Pablo. Jamás se me ha pasado por la cabeza ser obispo. Si alguno desea ser obispo, ha de ser consecuente con su deseo. Las cualidades de un buen obispo son también las cualidades para ser un buen sacerdote. Estos consejos nos vienen de perilla. Y también vienen bien para los cristianos. Debemos ser consecuentes con nuestros deseos. "Pero es preciso que el obispo sea irreprehensible" que no haya por donde cogerlo. Marido de una sola mujer. El hecho de casarse una vez era una actitud comprensible. Pero casarse dos veces, bueno está lo bueno. Pero no lo quería para el episcopado. Las razones serían muy graciosas de comentar, pero las comprenderéis cuando seáis mayores. La repetición de ciertas acciones heroicas... No supone nada esto en detrimento del matrimonio. Sobrio. Cortés. Hospitalario. Capaz de enseñar. No dado al vino, ni pendenciero. Ecuánime. No camorrista, ni amigo del dinero. Que sepa gobernar su propia casa. Si no sabe gobernar su casa, tampoco podría gobernar la Iglesia. No neófito. Podemos correr el peligro de no ser consecuentes con la llamada que nos hace Dios. Una de las cualidades que necesitamos, en este mundo tan malo, de ser hombres ilusionados. Al que todo le da igual, no sirve para esto. El que llega tarde a la lectura... Venir a tiempo a la lectura tiene una gran importancia. Me admiro de la naturaleza humana. Me admiro de lo ineficaces que son los sermones. Puro del Padre. No se puede llegar a las alturas de la contemplación si no se viven las virtudes humanas. No se puede llegar a la santidad sin pasar por ser hombre o mujer. Para ser hombre, no hay que estar pendiente de sí mismo. Menciona a Tomás y a Juan Marín. Crítica a los que se pasan hablando de sus enfermedades. Solución de Marín a los que quieren narrar sus enfermedades. Esto es para echarse a llorar. Estamos pendiente por si me ha salido un barrito en la cara. Narciso y Apolo. Marín le decía que el domino de las enfermedades... Una chica le comentaba que se ha hecho análisis de sangre porque se le quiebran las uñas. Esto denota ausencia de los verdaderos problemas y esto nos incapacita para todos. Ayer cuando abrí las folias para la lectura, me preguntaba ¿para qué? Hay que ser cortés. Hay que ser hospitalarios. Capaz de enseñar. Hay gente que enseña el trasero. Hay que darle un giro a nuestra vida ahora que vienen nuestros hermanos de Burgos. ¡Qué difícil es la ilusión! Os he demostrado a algunos de vosotros que el amor entre vosotros no es fácil. Ayer me costó mucho dejaros sin película. Habla de uno de los nuestros que se le pasa hacer un examen de la universidad o pensando en su mamá. Habla de Antonio. El Padre habla de su inicio de sacerdote. Habla de una carta de una chica que recibió el otro día. Es muy difícil formar hombres y mujeres. Ayer tarde harto de tomar disgustos, me tomé la medicina "cubatasa", para olvidar penas y morirme de risa. El otro día tuvimos aquí un conato de charla literaria, leyendo a Miguel Hernández, y hubiera deseado que Handy tuviera la cámara para que vieras vuestras caras. Si no nos dice nada la buena literatura, tampoco nos diría nada otras cosas. La indiferencia de la juventud actual. Viven como caracoles. Habla de cómo se le saltan las lágrimas cuando sale al mar, a pescar, o con Carmen y las chicas a Puntas de Calnegre. Habla de sus lecturas de Gilson. La facultad de pensar. Es un placer divino. El mundo del pensamiento es un mundo maravilloso. "Y el Espíritu os enseñará..." El descubrimiento de Dios como Amor y Ser. Y nosotros pensando en el desayuno.