Para uso interno por el estilo de hablar del Padre. Aunque está clasificada como meditación, más parece una charla. Además son dos charlas unidas en una. El Padre habla de la preparación de la Semana Santa en el Pedregal. Le preocupa el problema económico. Dice que va a pedir un préstamos de $300,000 pesetas para poder poner el Pedregal en buenas condiciones. Hay que comprar cosas para la cocina para Carmen, Hay que comprar más literas. Etc. Habla de la hipoteca del piso, unas 7,000 pesetas. Le preocupa también los niños pequeños. Pide a Jose María que vaya con él a visitar a una señora. En este tema ve a los mayores que entiende mal el problema de los apegos y de los mimos a los chicos. Quiere echar al chico Pencho porque es un despistado. Habla del Padre Joseíco y el apostolado con él. También le preocupa que una minoría de los nuestros no está funcionando bien. El Padr sueña que cambie esta pequeña minoría. El Padre se echa la culpa a su falta de entrega. Ayer le saludó el rector del seminario vestido de laico en la librería diocesana. El Padre no le dijo lo que estaba pensando de él. Y piensa que tenía que haberle dicho lo que pensaba. Habla de una charla que dio el día de San José pero no hay record de ella. Menciona a Miguel Angel. En el minuto 23 empieza otra charla sobre la humildad y la soberbia, dada el día de la Inmaculada. Hace referencia a la homilía de la mañana, de la cual tampoco hay record. El mal se puede vencer con la abundancia del bien. Al mundo lo venceremos con nuestra vida, así como lo hizo San Francisco. Acaba de venir de Madrid y que pidamos por los americanos, especialmente por el Padre Paulino.